2 ago 2012

Recuerdos.


Estoy solo y no se qué hacer. Solo escucho música en mi habitación y me llegan recuerdos de nuestra amistad. Era tan rara como cierta y pura. Mi mejor amigo jugaba papeles distintos, pero igual de importantes en mi vida. Algún que otro beso se interponía entre nosotros y, por lo menos a mi, me hacía volar. Sus abrazos me daban cariño, contención y abrigo cada vez que algo dolía en el pecho. Me escuchaba y yo le escuchaba de igual manera, eramos... La dupla perfecta, los mejores amigos. Su compañía me hacía tanta falta cada vez que su rostro volvía a mi mente... Ya van dos años sin verle, sin escucharle, sin sentirle, sin leer sus cartas diciéndome lo bien que estaba o cómo se sentía. Extraño darle mi apoyo, con simples palabras.

Me dolió cuando de repente me envió la última y más demoledora carta en tinta roja, diciéndome que por diversas razones ya no quería más mi amistad. No me odiaba, en realidad no me importaba si lo hacía ya que eso significa que aun sentía algo por mí, lo que si importaba, dolía y duele, es que dejó de tener sentimientos hacia mí mientras yo sentía por él más que molestia, odio, cariño, amistad y alguna vez... Amor.

La canción que escucho ahora me ablanda, mi corazón se vuelve delator... Traicionándome. Haciéndome demostrar todo lo que hacia mi mejor amigo siento... Cada recuerdo un palpito, cada recuerdo un sentimiento distinto y las ganas de llorar afloran de lo profundo del alma, las lágrimas salen sin pedir permiso y bañan mi rostro de a poco. Pienso que quizás ya no me recuerde, quizás se olvidó completamente de mi. Oh, carajo, ha vibrado mi móvil.

"Bueno... No se si tengas el mismo número de móvil pero quiero escribirte de todas formas. Perdón por todo lo que he dicho, pues me arrepiento rotundamente de ello. Jay, perdóname, hermano, eres todo en mi vida y no... Jamás debí haber dicho eso, jamás debí rechazarte. Lo peor de todo es que necesito verte y abrazarte, necesito de tu contención, necesito hablar y decirte tantas cosas... Vivo cerca de tu departamento y no he podido atreverme a pasar si quiera por la vereda del edificio de la vergüenza que siento. Perdóname, Jay. Perdóname, cariño.

Espero estés muy bien y llevando una bonita vida. Cariños, besos y abrazos, Will."

Joder, tengo el corazón acelerado. William ha vuelto a escribirme!! Me siento más feliz que nunca.
Se ha cumplido lo que pensé en un principio: "Espera, y en el momento indicado, llegará lo indicado para ti".

No hay comentarios:

Publicar un comentario